sábado, 25 de junio de 2011

Confusiones laberínticas

Al borde de los colores y las estrellas,
temblando como una hoja atacada por el viento,
jugando con las palabras,
colocando estrategicamente desordenadas todas las ideas,
esperando que la muerte sorprenda durante alguna noche,
pensando en la infancia lejana e incomprendida.

La canción de cuna que suena por los pasillos
las identidades se evaporaron,
las voces quedaron ahogadas y enterradas
fueron lloradas, fueron violadas,
fueron rompiendo un corazón azul.

Los muros han desprotegido los pensamientos,
el recuerdo de un amor, de un mundo, de una familia
de cosas que ya no existen, de un planeta que es lejano.

El piano de su padre, el recuerdo de una madre que no se siente.
Los latidos de un corazón drogado, la mirada perdida de los años.
Oscura muerte.

Locura perdida de la historia rara,
el nombre olvidado en las cartas que te mandó durante sus delirios mas reales.
Ya no estas en su mente porque ya no tiene mente,
porque ya no tiene humanidad, porque le han congelado el mundo.

Descubrió soledad,
lloró,
vio que lo oculto estaba,
se volvió oscuro y todo murió.

1 comentario:

Pablo Distinto dijo...

Un descubrimiento escalofriante.


Atte:

Pablo Terrible