domingo, 7 de octubre de 2018

Puedo arder
Hasta dejar roja tu piel
Arder, mi ser
Arder hasta incinerar todo mi ser

domingo, 30 de septiembre de 2018

Primaveral

Remolino de polen, el cielo terciopelo y los arboles sosteniendo la galaxia. Mis manos nerviosas bailan en mi cara, peinan mis rulos y se aferran a la tela de mi vestido, con fuerza. Mis ojos fascinados, no soportan el brillo de los semaforos, ni la textura del piso, ni el calor de mirarte y me persigue el miedo de que te des cuenta de lo que ya es obvio.
Viajando en un planeta estrindente, mi pecho explotado y las flores que  cortamos del árbol que nos miraba, bailan en tus manos. Amarillas, rojas, pimpollos, bolitas, bichitos, el árbol, al norte.
Respiro para sentir como me inflo de aire frio del mundo amanecido, autos giran alrededor en camara lenta y los seguimos hasta que, de golpe, todo se acelera, y un hombre nos mira.
Ahí parados, somos estatuas, somos magía, somos el silencio abismal que nos contiene para no fundirnos. No, no confundirnos.
Me voy, pero llego, lo prometo.
Te vas, pero quiero que me sigas, sin promesas.
¿Ya te fuiste? Me perdiste o es lo que que quiero mentir, para contener el corazón en este pecho con la primavera adentro.

Sin tiempo

Vos,
Yo,
Nosotros.
No somos.

jueves, 21 de junio de 2018

Tu espina que se quedó clavada en mi carne
hoy me pincha en el pecho
y no me aguanto estas ganas de llorar
y la aprieto más fuerte,
que se hunda en este hueco
a ver si este dolor mudo te trae en algún recuerdo más nitido
pero ya ni en el recuerdo borroso de tus besos te veo
no te veo
ya ni en el dolor asfixiante te siento
no siento
y no muero

lunes, 2 de abril de 2018

Wait

Ya sé que no va a pasa nada más en este histérico plan de huir.

Rayos

Te miré entre los cielos lluviosos de aquellas mañanas, todo se habia tornado borroso. La heridas empezaron a doler un poco, las caricias flotaban en los charcos que habitaban en nuestra casa. El olor a tierra mojada invadían la escena, mis palabras estaban empapadas, haciamos agua, y en tus ojos pude ver la tormenta.
Nos quedamos en silencio, ya estaba todo dicho.
La puerta se cerró y nos quedamos afuera.
No me beses, por favor.