martes, 27 de julio de 2010

Violeta

La textura de su mente mutó y la percepción del mundo se volvió tan fuerte que las cadenas se cortaron. La febril mirada del cielo la arrastro al mar y los sentimientos de bien.estar le devolvieron las amapolas que, como en primavera, brotaban de su boca.
Ya poco importa el espacio entre su pecho y los acantilados, los aromas nacen y embriagan los mundos que giran en su abdomen.
Su cuerpo, su sexo y su ser, ahora son libres, salvajes y brutales.

3 comentarios:

Nabulio dijo...

si es verdad ultimamente nos estamos como encontrando online
estas entradas cortas pero fulminantes que tenes son medio quemacocos
abrazoooo

Nabulio dijo...

je que loco este espacio los dos despues de tanto tiempo
coincidiendo una vez mas
je
se me cuidaaaaa y quiero tener mas ideasss

Casiopeia dijo...

hace mucho no entraba a ningun lado
y cuánto me he perdido...
dejame decirte que hoy volví a recordar
cuanto me gusta leer esto...
me estoy poniendo al día leyendo todos...
y siento a veces que hay muchos
capaz de concidencia
capaz de la concidencia que yo quiero crear
que presiento que ese mismo día
pensaba igual a lo que escribiste...
cuánto me he identificado con lo que has escrito sobre tú cumple...
es que lo veo venir el mío
y siento como si hubiera leido dentro
de mi cabeza...
saludos grandes y besos caiopicos