miércoles, 27 de junio de 2012

No me mires así

Mi cabeza se ha vuelto una tierra infertil, en donde las semillas de las ideas ya no crecen. Mi almohada es un cementerio de lagrimas que atesta de sueños y gritos, mi cuerpo es un jardín que alguna vez tuvo noches, lunas, estrellas, flores; pero hoy esta cubierto de yuyos, moho y las hiedras venenosas que supieron ser caricias.
Ya no tengo la menor idea de quien soy, que quiero o si vivo. Los personajes se me mezclaron y terminaron todos muertos ante la atroz guerra que me declaraste con tus locas. Lo entregué todo a cambio de un par de mentiras, un poco de sexo y tu perfume en mi cuerpo. Si vamos al caso, la mejor parte se la llevaron las otras y vos... y las otras.
Ahora soy un fantasma, un algo que habita en rincones oscuros de alguna calles de la gran ciudad. Soy una mujer que perdió el sexto sentido... a decir verdad soy el cadáver de una mujer, porque ya no tengo sentidos. Pero a nadie le interesa, pues, el mundo va tan rápido que me pierdo entre la masa y me camuflo con el pintoresco paisaje del tango porteño y las almas en pena.

No hay comentarios: